martes, 14 de octubre de 2014

BOTELLAS SIN MAR Y LIBROS SIN TECHO. TENDENCIAS CALLEJERAS

En las últimas décadas los avances tecnológicos han copado toda nuestra atención, las redes sociales han manejado las tendencias a su antojo y la inmediatez ha sido el pan nuestro de cada día. Por eso, podría parecer imposible la rápida proliferación que han vivido los hipsters con sus galletitas caseras y sus huertos urbanos (¿reacción?).



Junto a estos movimientos, han encontrado su hueco muchas acciones, algunas basadas en costumbres olvidadas hace año: mensajes en botellas surcan nuestras calles en busca de quien las descorche; libros de papel (y hueso) que esperan pacientes, olvidados en cualquier banco, etc.


Con esta idea, LINDA Limón nos trae al madrileño barrio de Malasaña el juego Mensaje en una Botella. Con esta divertida acción de street marketing, la marca de refrescos ha sabido engancharse a esta corriente. ¿Cómo funciona? Pide una botella a LINDA Limón, rellena tu mensaje y ellos se encargan de entregarla a su destinatario.


Los mensajes en una botella han recorrido un largo camino repleto de historias increíbles, desde el descorchador único de la reina Isabel I, hasta el marinero sueco que invitaba a todas las chicas que quisieran casarse con un atractivo rubio a escribirle… (más historias aquí) (http://www.quo.es/naturaleza/historias-de-corrientes). Y ahora, Linda Limón nos invita a experimentarlo con un toque diferente, sin agua de por medio. Sí, con fines publicitarios pero, al fin y al cabo, una botella y un mensaje en lugar de un whatsapp.

No es el único ejemplo de vuelta a los orígenes. ¿Alguna vez te ha sorprendido encontrarte con un libro “abandonado” en la calle? Probablemente no se trate de un libro olvidado, no, al menos, involuntariamente.


Desde hace algunos años, se viene practicando el bookcrossing. Una “biblioteca callejera” con un funcionamiento totalmente anónimo, gratuito y altruista: abandonar libros en lugares públicos para que puedan ser recogidos por otros lectores que después harán lo propio. En este caso, a diferencia de la botella de LINDA, no existe ningún fin lucrativo (tiempo al tiempo…)



Campañas publicitarias aparte, este tipo de relaciones urbanas hacen de las calles un lugar especial.  ¿Te animas?

Imágenes: http://europaquevoy.wordpress.com/, pinteres, LINDA Limón