¿Cuántas contraseñas recuerdas
diariamente? Las páginas web o redes sociales piden contraseñas cada vez más complejas: como mínimo 6 u 8
caracteres, alguna mayúscula, números... Pero parece que el fin de este tormento está cerca. Las
contraseñas tradicionales están siendo sustituidas por la tecnología biométrica.
Esta técnica se basa en el reconocimiento de una
característica física como la huella digital, la retina, el iris o los patrones
faciales. Estos rasgos intransferibles del ser humano son interpretados por un
software biométrico que interpreta la muestra física y la transforma. De esta manera, no se necesitará un rosario de números y
letras para cada gadget o tarjeta de crédito. Nuestras cualidades físicas serán
las responsables de mantener a salvo nuestras posesiones.
Toda
una revolución
De
hecho, el crecimiento de las app de autenticación biométrica va a ser
exponencial. Un nuevo informe de Juniper Research, una de las principales
firmas de analistas en el sector de tecnología móvil y digital, informa que más
de 770 millones de estas aplicaciones se
descargarán en 2019, frente a los 6 millones de apps previstas para este año.
¿Cosa
de espías?
Algunos
sectores vienen aplicando esta tecnología desde hace años. El forense para
la identificación de criminales, la seguridad en prisiones, etc. o el ámbito gubernamental
para pasaportes, tarjetas de identidad, firma electrónico,... Es el sector comercial el que lo está incorporando al día a día del consumidor,
como por ejemplo el hotelero, con el control de acceso a las habitaciones, o el
pago de los servicios dentro del hotel.
La marca Apple hace ya dos años
que incluyó la biométrica entre sus características diferenciadoras,
permitiendo acceder al móvil a través de la huella digital, el denominado Touch
ID. Sin embargo, no fue el primero, en 2011 Motorola introdujo la huella como
sistema de seguridad con el modelo 4G Atrix. Esta tecnología abre paso a que
otras marcas de telefonía como Samsung y Huawei estén incluyendo la biométrica
en sus dispositivos.
¿Se puede usar para la
publicidad?
La
tecnología biométrica se une a wearable (dispositivo que se lleva sobre, debajo
o incluido en la ropa y que está siempre encendido) para formar una combinación
perfecta. Ambos forman adaptive marketing, los mensajes que se adaptan
al consumidor inmediatamente. Esta información puede servir a las marcas
para saber cómo afecta a los consumidores los anuncios que ven en sus
domicilios, si les interesa, les emociona o en
cambio les es indiferente.
Algunas
marcas como Google o Pepsi ya están dando a conocer su potencial.
Si quieres comenzar ya a utilizar
apps con sistemas biométricos estas son algunas de las que podrás encontrar:
Biowallet, almacena y
protege las contraseñas e información sensible (vídeos, fotos, etc) y reconoce
la firma manuscrita como forma de acceso.
App Lock, puede bloquear
mensajes SMS, contactos, Gmail, Facebook, galería, configuración, llamadas y
cualquier app.
NameTag hace un reconocimiento
visual capaz de tomar la fotografía de una persona desconocida, analizar su
rostro y buscarlo en cualquier red social en línea.
Make Up Genius es capaz
de hacer que el móvil o la tablet funcionen prácticamente como un espejo. Tras
un escáner previo bastante rápido se proyecta el maquillaje sobre la imagen del
rostro.